Filtro de partículas LAND ROVER

En los coches diésel Land Rover, el filtro de partículas (FAP / DPF) forma parte del sistema de escape y ayuda a reducir las emisiones de hollín y gases contaminantes. Esta pieza retiene las partículas sólidas generadas por los motores diésel y, a partir de cierta carga, inicia un proceso de limpieza automática mediante altas temperaturas. Gracias a este control de las emisiones, su vehículo cumple la normativa vigente en España y en otros países de la UE, mientras mantiene el funcionamiento correcto del motor en uso cotidiano y en trayectos más largos con diferentes tipos de conducción.

El intervalo de cambio del filtro de partículas en un Land Rover Range Rover u otros modelos depende del tipo de uso del coche, del estado del motor y del mantenimiento general. Un DPF saturado puede detectarse por pérdida de potencia, aumento de consumo o testigos de avería en el cuadro. Si la limpieza ya no es posible o las regeneraciones son demasiado frecuentes, se recomienda la sustitución por un filtro nuevo de alta calidad. Según el fabricante y el modelo, el kilometraje puede variar, pero un uso intensivo en ciudad y trayectos cortos acelera el desgaste, mientras que la circulación regular por carretera ayuda a prolongar la vida útil del sistema.

El sistema DPF/FAP de su Land Rover controla la acumulación de hollín mediante sensores de presión y temperatura instalados a través de la línea de escape. Dependiendo de la carga de partículas y de la temperatura de los gases, la centralita del motor inicia el proceso de regeneración para quemar los residuos acumulados en el interior del filtro. Este proceso puede ser pasivo (durante la conducción normal) o asistido electrónicamente cuando el motor alcanza las condiciones adecuadas.

• Limpieza pasiva: se realiza mientras conduce a velocidad estable, normalmente en carretera, cuando la temperatura de los gases es suficientemente alta.
• Limpieza asistida: la unidad de control inyecta más combustible para aumentar la temperatura en el DPF y quemar las partículas.
• Control de presión: los sensores antes y después del filtro miden la diferencia de presión para estimar el nivel de saturación.
• Protección del motor: si la presión es demasiado alta, el sistema limita las prestaciones para evitar daños mayores.

Cuando el filtro está dañado o saturado de manera irreversible, la mejor solución es la sustitución por una pieza nueva adecuada para su Land Rover, evitando manipulaciones que puedan afectar a las emisiones o a la inspección técnica del vehículo.

Los Land Rover diésel pueden equipar diferentes tipos de DPF/FAP según el motor (2.2, 3.0, 3.6, etc.), la generación del Range Rover, Range Rover Evoque, Discovery, Freelander y otros. Cada referencia se diseña para un modelo y año concretos, con un montaje específico y, en algunos casos, con catalizador incluido en el mismo cuerpo. Es fundamental seleccionar la pieza correcta para que el sistema de escape funcione de forma óptima y se respeten las especificaciones del fabricante.

• FAP/DPF con catalizador integrado: una sola pieza que combina catalizador y filtro de partículas para un control más eficaz de emisiones.
• FAP/DPF delantero o trasero: algunos Range Rover utilizan varios módulos en función del diseño del escape.
• Versiones para motores diésel con diferentes potencias: mismas cilindradas pero referencias distintas según el código de motor.
• Kits de montaje: pueden incluir juntas, abrazaderas u otros elementos necesarios para el montaje profesional del nuevo filtro.

Para elegir el recambio adecuado se recomienda utilizar la matrícula, el número de bastidor (VIN) o la referencia OEM original, y verificar siempre la compatibilidad del DPF/FAP con la ficha técnica de su vehículo antes de realizar la compra online.

Optar por un filtro de partículas nuevo de origen para su Land Rover ofrece un mejor control de emisiones, mayor durabilidad y un funcionamiento más estable del motor. Un DPF/FAP fabricado con cerámica de calidad y carcasa en acero inoxidable permite soportar sin problema los ciclos repetidos de limpieza, incluso en motores diésel de alta cilindrada típicos de Range Rover y otros modelos de la marca.

• Compatibilidad con las normas de emisiones europeas vigentes para coches diésel.
• Mejor gestión del flujo de gases y de la presión en el escape, ayudando a mantener las prestaciones.
• Montaje más sencillo cuando la pieza respeta las dimensiones y fijaciones de origen.
• Relación calidad/precio optimizada al evitar fallos prematuros y sustituciones repetidas.

Con un filtro nuevo correctamente instalado, es posible mantener durante más tiempo la eficiencia global del sistema de escape y reducir el riesgo de averías costosas relacionadas con el motor o con otros elementos asociados al DPF/FAP.

El montaje de un filtro de partículas Land Rover requiere un procedimiento riguroso para evitar fugas de gases, errores de presión o daños en el nuevo recambio. Siempre se recomienda que la instalación la realice un taller o profesional especializado en sistemas de escape, con el equipo adecuado para el diagnóstico y la programación del vehículo.

Durante la sustitución del DPF/FAP en un Range Rover, Evoque u otro modelo, se deben seguir varias etapas técnicas para garantizar un resultado fiable en el tiempo y respetar las condiciones de garantía del fabricante.

• Sustituir juntas, tornillería y, si es necesario, los sensores vinculados al control del DPF (presión, temperatura).
• Verificar el estado del catalizador asociado y de otras piezas del sistema de escape.
• Comprobar que no haya obstrucciones en la línea ni en el sistema de gestión de gases.
• Realizar un reinicio de los parámetros del DPF y, según el caso, una regeneración forzada con herramienta de diagnóstico.
• Controlar que no haya códigos de avería activos relacionados con el motor y los sistemas anticontaminación.

Un montaje cuidadoso y conforme a las recomendaciones técnicas le ayuda a aprovechar al máximo su nuevo filtro de partículas y a prevenir problemas futuros vinculados al uso intensivo o a trayectos cortos repetidos.

Antes de confirmar la compra online de un filtro de partículas para su Land Rover, es importante reunir la información técnica del vehículo y de la pieza buscada. Esto reduce el riesgo de errores de selección y facilita una entrega rápida sin devoluciones innecesarias.

• Modelo exacto (por ejemplo, Range Rover Evoque, Range Rover Sport, Discovery, Freelander).
• Código de motor y potencia en kW/CV, tipo de combustible (diésel) y año de fabricación.
• Número de bastidor (VIN) o referencia OEM del DPF/FAP/catalizador original.
• Tipo de sistema (sólo filtro de partículas o filtro con catalizador incluido).
• Condiciones de uso del coche: urbano, mixto, grandes distancias, etc.

Con estos datos será más sencillo identificar la pieza adecuada y aprovechar las mejores opciones de precio, selección de fabricante y plazos de envío disponibles en la web especializada en recambios de escape para Land Rover.

Al realizar su pedido online de un filtro de partículas para Land Rover, la web indica el precio del producto, las opciones de envío y los plazos estimados en días laborables. Según el destino en España o en otros países europeos, se proponen entregas estándar o exprés, con seguimiento y confirmación por correo electrónico una vez que la pieza sale de almacén o de fábrica.

• Entrega estándar en varios días laborables según disponibilidad de stock y transportista.
• Opciones exprés para recibir el recambio en menos tiempo, dependiendo de la dirección de entrega.
• Posibilidad de devolución dentro del plazo indicado, siempre que la pieza esté en estado nuevo, sin montar y en su embalaje original.
• Garantía de 3 años para filtros de partículas y catalizadores nuevos, limitada a un kilometraje máximo y al respeto de las condiciones de montaje profesional.

Para cualquier ayuda relacionada con el seguimiento del pedido, la devolución de una pieza o una consulta sobre la garantía, puede contactar con el servicio de atención al cliente indicado en la web. El equipo técnico le ayudará a encontrar la solución más adecuada para su vehículo Land Rover y su sistema de escape.

De este modo, se asegura un proceso completo y transparente: desde la selección del DPF/FAP más apropiado para su Land Rover, pasando por la entrega, hasta el posible reciclaje de la pieza usada y la asistencia durante toda la vida útil del recambio nuevo.